El crecimiento de una empresa enfrenta diferentes retos y problemáticas. Pero las actividades del día a día terminan por comerse los esfuerzos de las personas, tanto colaboradores, directores como gerentes, cuyo propósito consiste en ayudar a crecer el negocio.

Vamos más allá: generalmente, para crecer se establece un plan mas ante tanta actividad, este termina abandonándose.

Desde mi experiencia como consultor comercial, lo anterior sucede porque hace falta una persona o equipo responsable en las empresas, que justamente se encargue de esos planes. No sólo proponerlos, previo análisis de la situación de la empresa, sino también de monitorear las acciones y sus resultados; su estatus, avances y brindar retroalimentación a quienes participan, ya sea de manera individual o en equipo.

Si no existe esa área o esa persona, tampoco puede existir una metodología que ayude a impulsar ese plan y por consecuencia el crecimiento de la empresa.

En este blog, revisaremos principalmente aquellas problemáticas relacionadas con los colaboradores en las empresas micro y pequeñas (MiPyME), y cuyo impacto es determinante para tener a esa persona que nos ayude a liderar los planes de crecimiento. A saber:

1. Contratación: en la mayoría de los casos, no se tiene un área o responsable para el reclutamiento de personas. Cubrir aquellas vacantes se vuelve una acción importante a fin de atraer el talento que requiere la empresa para concretar su desarrollo y crecimiento.

Puede pensarse que este tipo de actividad es operativa y en ese sentido se deja a quienes muchas veces no tiene la formación y sensibilidad para atraer personal. Tener a alguien profesionalizado en dicho proceso garantiza tener el mejor talento en nuestra empresa.

2. Esquemas de compensación: En la MiPyME les cuesta trabajo definir y diseñar esquemas de compensación o pago. En la mayoría de los casos, me atrevo a decir que no se tiene idea de cómo hacerlo. Tener un esquema de este tipo ayuda a que los colaboradores se sientan parte de la organización y se planteen retos; lo cual impacta en el alcance de metas en beneficio del negocio. De no tenerlo, los colaboradores sólo harían su trabajo y ya, sin tanto compromiso.
3. Definición y documentación de puestos y procesos: Es frecuente que no se tengan perfiles de puesto definidos ni mucho menos hay documentación de procesos. Estos, en el mejor de los casos, se diseñan sobre la marcha; lo que se traduce en problemas para resolver situaciones comunes rápidamente y de manera permanente.

Debe verse como estratégico, ya que asegura que las personas estén en los puestos adecuados para su perfil y se tenga claro cuáles son sus responsabilidades, alcance y cumplimiento de indicadores.

4. Planeación: de suma importancia para crecer y el talón de Aquiles de muchas empresas. No hay planes estratégicos, con acciones concretas que estén coordinadas en tiempo y alineadas unas a otras para conseguir los objetivos y metas.
5. Ejecución: esta va de la mano de la planeación. Una vez que se creen y propongan los planes, habrá que comenzar con su ejecución. No podemos establecer planes y estos se queden en el papel, o en la menta de alguien. Deben ponerse en marcha. Aquí se trata de actuar y ya con lineamiento establecidos por quien lidera o coordina los planes. De igual modo, generar reportes con tablas y gráficos de resultados; después hacer reuniones para explicar y analizar la información, armar un plan de acción con pasos a seguir con responsables y fechas de entrega o termino.

Es fascinante entender y desarrollar, así como apoyar, la dinámica de los negocios desde diferentes aspectos. Estos 5 puntos representan el inicio para formar el área o tener a la persona que lleve a buen puerto esos planes de crecimiento, sin importar el tamaño y el giro de la empresa.

Mas adelante hablaremos del método Sprint, el cual ayuda a resolver problemas y probar nuevas ideas en tan sólo 5 días con beneficios en el negocio.

Definitivamente vale la pena echarse un clavado para conocer nuevas formas de hacer las cosas.